Lo más visitado de mi blog

29 mar 2012

¿Miedo o felicidad?

Siento que crece, que ese algo tan especial que se encuentra ahí, me va a cambiar la vida, no se si para bien o para mal, pero me la cambiará por completo.
No se si estar feliz, si sonreir, hacer una fiesta para celebrarlo, ó si debo llorar, estar asustada, no poder levantar la cabeza, avergonzarme,... no se...
Pase lo que pase tengo que salir adelante, enfrentarme a los obstáculos, al fin y al cabo, tampoco tiene la culpa, la tengo yo por no pensar las cosas antes de hacerlas, tiene que ser feliz.

1 mar 2012

Aun así, si se te escapa daré millones de vueltas si hace falta, pero súbete...

No siempre se puede ganar, hay que aprender a aceptar la derrota, a decir, basta no va mas, a entender que lo que no funciona, no funciona, y nunca va a funcionar. Los seres humanos vivimos agobiados de problemas estupidos, no nos damos cuenta que las cosas van de cabeza y nosotros nos ocupamos de lo que esta bien, o de lo que no hace falta. A veces hace falta un buen golpe para darnos cuenta que estamos perdiendo eso que tanto queremos, que tanto necesitamos. Como dice la frase, NADIE SABE LO QUE TIENE HASTA QUE LO PIERDE, y es verdad que yo fui muy ciega, muy tarada, que casi echo a perder lo mas lindo que me paso en la vida y cada vez que pienso en eso me siento mal, como si por mi culpa casi se arruina algo tan lindo (aunque en parte creo que arruine) pero aun asi las cosas siguen, porque yo aprendi a no rendirme nunca, incluso aunque sea necesario. El tren pasa una sola vez, y una vez que arranca no para mas. Subete de una vez deja de hacer cagadas, porque el tren no te espera, duela lo mucho que duela, el tren no espera mas. 

Mi gente, Garachico...

Unos se ván, otros se quedan. Estos que se van, se llevan consigo recuerdos. Recuerdos que se quedan en ese lugar de la mente donde se aloja la esperanza, y el anelo. 
La esperanza te da ese empuje a levantarte cada mañana, a ver las cosas desde un punto de vista positivo. 
El anehlo te ayuda a no olvidar... a echar de menos algo/alguien.

Tú (J_R_E - D_A_)

Lo único que quiero es que sepás, que aunque el tiempo pase, y se nos olviden nuestros nombres, nuestras caras, nuestras pieles; aunque todo pase y nunca más volvamos a encontrarnos; aunque se pierdan las fotos, los versos, las cartas; aunque todo se esfume con el polvo, con el pañuelo de la vida que todo lo borra, que todo lo limpia; aunque tu mano nunca más se pose sobre la mía otra vez; aún con todo eso, creeme, viviré tranquila. Lo sé, porque aunque tú ya no existas en mi mente, de alguna manera sabré para siempre que un día, no hace mucho, no hace tanto como parece, fui feliz. -contigo-

Esperar o no... esa es la cuestión.

Esperar a tener más de tres años para adentrarse al mundo de Playmobil sin atragantarse con las piececitas de los muñecos, esperar dos navidades para que te regalen aquella sorpresa que siempre deseaste o simplemente a tener dieciocho para ser mayor de edad y no depender de nadie. Pero… ¿Qué pasaría si la espera no te serviría de nada? Si pasas toda una vida esperando, dependiendo de las agujas de un reloj y de los días que contienen un calendario, aún
sabiendo que no valdrá la pena.